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CUERPO & ALMA | 09-11-2015 19:24

En la intimidad, bella y cómoda

La cirugía cosmetoginecológica y las intervenciones para tratar la incontinencia urinaria están a la orden del día. Un especialista dio detalla cada una de ellas.

Los avances de la tecnología en distintos ámbitos de la salud sorprenden día a día. En ese camino, comenzaron a ocupar posiciones predominantes todos aquellos desarrollos orientados a la belleza y el confort, como alternativas valederas a la mítica "fuente de la juventud".

El doctor Alexandros Bader estuvo en el país, es un especialista griego en cirugía cosmetoginecológica y de incontinencia urinaria femenina, invitado por la Asociación Médica Argentina para el dictado de un workshop, del que también participó el experto local Jorge Elías. Hablamos con Bader sobre las características de ambas intervenciones.

¿Creció el interés en la cirugía cosmetoginecológica en general en los últimos años?

-He percibido un incremento fuerte en el interés en este tipo de tratamientos en mis tres prácticas en Londres, Dubai y Atenas. Estuve chequeando mis estadísticas y el número de pacientes que requieren procedimientos ginecológicos cosméticos se multiplicó 8 veces en los últimos 5 años. La razón para esto, en mi opinión, es que estamos viviendo en un mundo más libre y liberal, la gente tiene menos tabúes y su vida íntima y sexual es muy importante. La evolución de la liberación sexual humana juega un fuerte rol en esto. Yo puedo decir que el rediseño y rejuvenecimiento vaginal es el procedimiento más popular de los que llevo a cabo.

¿Hay alguna diferencia en los pedidos que le hacen las europeas, las estadounidenses y las latinoamericanas? ¿Hacia dónde apuntan cada una de ellas a la hora de someterse a una intervención de este tipo?

-¡Yo diría entre Oriente y Occidente! Los pacientes del Medio Oriente y del Oriente en general están más interesados en la mejora de la funcionalidad por tensado vaginal y el borrado de cicatrices de varios partos. En Occidente puedo decir que el remodelado de los labios menores y mayores , tanto como el blanqueamiento de la zona, son los procedimientos más solicitados. Las necesidades corporales y culturales difieren de región a región y esto hace que la ginecología cosmética sea aún más interesante para mí.

¿Con qué tecnologías cuenta hoy esta especialidad?

-Definitivamente el láser es el "Gold Standard" en este tipo de cirugías. Con el láser se pueden obtener mejores resultados comparado con la cirugía tradicional con tijeras y bisturí que utilizábamos en el pasado. La tecnología láser tiene la habilidad mágica de convertirse en invasiva o no invasiva dependiendo de la configuración y del entrenamiento que tenga el doctor.

¿Cómo es la recuperación de una cirugía de este tipo? ¿Cuándo la mujer puede volver a sus actividades normales, tanto laborales como relaciones íntimas?

-Esto depende de cuál es el procedimiento que el paciente está recibiendo. Aproximadamente, esto debería ser de 4 a 6 semanas en caso de que el procedimiento fuera invasivo o pocos días en caso de un tratamiento no invasivo.

Usted también realiza cirugías relacionadas con la incontinencia urinaria. ¿Crecieron éstas en los últimos años?

-Este problema está incrementándose día a día y los profesionales están informando a nuestros pacientes cómo nosotros podemos ayudarlos en este tema , esto hace que el número crezca y el interés sea mucho mayor.

¿Opina usted que la mujer siente hoy menos vergüenza al acercase al médico a consultarlo por este problema o sigue existiendo el pudor o tabú para hablar de ello?

-La mujeres cada vez tienen menos tabú por este tipo de prácticas, y lo puedo confirmar por mi experiencia incluso en Dubai.

¿En qué consiste la cirugía para tratar la incontinencia urinaria?

-Para incontinencia urinaria tenemos soluciones invasivas, a través del uso de mallas, y también no invasivas, utilizando un láser especial. Personalmente yo encuentro que el método láser es muy innovador y efectivo. Femilift de Alma Lasers se convirtió en el Golden Standard para muchos casos en los que no corresponde cirugía porque no son tan graves. Puedo confirmar que esta novedosa tecnología mejora la calidad de vida para una gran porción de la población femenina que sufre de incontinencia urinaria por estrés y convive con este problema sin ninguna solución a la vista.

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