Se supone que hoy con la extensión de la igualdad entre géneros, los hombres deberían tomar como natural que las mujeres sean tanto o más inteligentes que ellos. Se supone. De acuerdo con un reciente estudio publicado por tres universidades norteamericanas -la de Buffalo, la Luterana de California y la de Texas- en la última edición del Boletín Personality and Social Psychology, para ellos la idea de salir con una mujer que los supera en capacidad intelectual los descoloca y les resulta amenazante.
El estudio, basado sobre el comportamiento de 105 hombres, propone dos escenarios. En el primero, se les presentaron a mujeres a las que superaban en coeficiente intelectual o en áreas como la lengua y las matemáticas. A la hora de imaginarlas como parejas, los sujetos tendían a elegir a las que más se aproximaban a sus propias condiciones siempre por debajo de las suyas.
Sin embargo, en el segundo escenario, los participantes fueron sometidos a una prueba de inteligencia para luego comunicarles que conocerían a mujeres a las que les había ido mejor en el test. En este caso, los sujetos tendieron a puntuarlas como menos atractivas, mostraron menor deseo de conocerlas y poco interés en planificar una cita con ellas.
De acuerdo con los investigadores, aunque ellos aseguran preferir a mujeres inteligentes a la hora de la verdad se sienten amenazados cuando ellas realmente los superan en coeficiente intelectual. Y si bien por supuesto que no se trata de nada concluyente, el asunto resulta bastante deprimente.
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