Durante la escapada sorpresa a la campiña inglesa que realizaron George Clooney (53) y su prometida, la abogada Amal Alamuddin (36), encontraron el sitio donde podrían realizar su boda. Se trata del Castillo de Highclere, la mansión cercana a Londres donde se rueda la serie artistocrática Downton Abbey. Alamuddin quedó tan enamorada del lugar cuando lo visitó que la pareja ha iniciado las gestiones para reservar ese lugar de ensueño para el evento. La existente polémica sobre si el actor pagó impuestos por el anillo de pedida, no ha influido en la ilusión de los novios para con los preparativos.
Un "real" estilo: dejarse las canas
El Castillo de Highclere sería un escenario ideal para la boda, que está prevista para el 12 de septiembre de este mismo año, debido a su perfecta ubicación. Se trata de un lugar glamuroso al que se puede proteger fácilmente de los paparazzi sin tener que restarle la exhibición que los parientes de Oriente Próximo de Amal seguramente apreciarían. Además, está situado cerca de la ciudad de Londres y a la vez del aeropuerto de Heathrow. Esto permitiría a las familias de los novios acceder a ésta de forma rápida, dado que deben desplazarse desde EEUU por parte del él, y Dubai y el Líbano, por parte de ella.
Clooney entabló amistad con Hugh Bonneville, actor que encarna el personaje de Lord Robert Crawley en la ficción, cuando rodaron juntos The Monuments Men en 2013. A raíz de la confianza que tienen, Geroge le pidió que organizase una visita privada al castillo. Según fuentes al Daily Mail: “Cuando vio la reacción de su prometida ante la espectacular construcción victoriana, situada en 1.000 acres de terreno, comenzó a hacer algunas gestiones discretas para poder hacer la boda allí”. Los actuales residentes de la mansión son los octavos Lord y Lady Carnarvon con su familia, que dijeron que “estarían más que contentos de acogerlos". El matrimonio permite hacer bodas en la propiedad a partir de la módica cantidad de 23.000 dólares diarios por alquilar parte del edificio.
La pareja sigue barajando otras opciones, como la casa del actor en Lago Como en Italia o Cabo San Lucas en México. El problema con dichas ubicaciones es precisamente la dificultad para tener más intimidad y controlar a los medios que buscarán fotos del evento, algo que sí permite la mansión victoriana. Además se debe de tener en cuenta que Amal creció, estudió y trabaja actualmente en Reino Unido, lo que aún le suma más puntos para que la pareja acabe decantándose por el escenario británico.
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