La fiesta terminó con un concierto gratuito de Robbie Williams en la Plaza del Palacio donde Charlene y Alberto, desinhibidos y siempre de la mano, subieron al escenario para dedicar unas palabras al pueblo.
Perfilando deseos
Las celebraciones del aniversario comenzaron el sábado a primera hora con un acto oficial en el que participó toda la familia.
Charlotte, en solitario, deslumbró con un vestido de línea A estampado sin mangas para hacer frente al sol y al calor de la época. Charlene eligió como siempre un vestido blanco de escote halter cortado a la cintura justo a la altura de la rodilla. Ella y el príncipe Alberto no pararon de abrazarse, mirarse y hasta besarse frente a todo el principado.
Los papás de hoy
Otra que tampoco tuvo reparos en las demostraciones de afecto hacia su pequeño nieto, Sacha Casiraghi, fue Carolina que para la ocasión lució un vestido blanco con mangas hasta los codos. Los padres del niño, Andrea y Tatiana Santo Domingo -de coral y flores-, oficiaron de escoltas del romance entre su niño y la abuela.
El fantasma y el reggaetón
Para ir precalentando en eventos con vistas a su próxima boda, Beatrice Borromeo y Pierre Casiraghi no se perdieron detalle de la celebración. Ella, al igual que Charlotte, se peinó con un rodete alto de estilo desprolijo y un vestido blanco.
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