Rogelio Polesello fue, es y será el artista más reconocido del abstraccionismo geométrico. A un año de su fallecimiento, MALBA rinde homenaje y reconoce así a una figura central de la escena artística y cultural argentina del siglo XX.
El zapato como forma de arte
La muestra es una antología dedicada a sus obras históricas, pinturas y acrílicos producidos desde los años 50 hasta los 70. Se focaliza en los años en los cuáles se funda su trayectoria. La intención es pensar y conocer más acerca de la tríada arte-diseño-industria y su constante experimentación con las múltiples relaciones entre artes plásticas, arquitectura, diseño, cine y moda.
“El joven Polesello se insertó dentro del desarrollo de la abstracción geométrica y óptica argentina de un modo autónomo y original, con ampliaciones libres de esas categorías. Su obra se destacaba por su búsqueda de movimiento en lo estático, por los desafíos a la percepción a través de las oscilaciones entre figura y fondo, por las combinaciones de orden y aleatoriedad y por la audacia en la utilización del color, una marca de originalidad constante a lo largo de toda su producción”, destaca Mercedes Casanegra, curadora de la exposición.
García Uriburu y su amor por la vida
Pole, un personaje, un dandy que siempre estuvo presente en los acontecimientos culturales y sociales de Buenos Aires como un actor querido y respetado, hoy sigue vivo entre nosotros con su espíritu y su arte. Caminar por el Malba entre sus obras es sentirlo cerca. Su mujer Naná y sus amigos estuvieron presentes recordando anécdotas en el pre-opening al que nos tiene acostumbrados CITI, que nos ofrece la posibilidad de ver muestras únicas antes de su apertura oficial.
Miradas superadoras sobre la igualdad de género
Vale la pena recorrer la exposición para apreciar la talla de este artista que está sin duda al nivel de los mejores del mundo. Hasta el 12 de octubre en Museo MALBA.
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