El próximo 20 de noviembre, Florencia Salort, la ginecóloga y sexóloga dueña de la cuenta de Instagram @flordegineco, presenta su primer streaming ‘Del cerebro a la vagina’. En dialogo con Rouge, la docente e influencer dio detalles de la comunidad de mujeres que logró en las redes sociales y adelantó cómo será su show, un espacio dónde promete derribar los mitos y miedos sobre el deseo sexual y la falta de ganas.
¿Cómo convivir con un narcisista?
¿Cómo se puede definir el espacio que generaste en las redes sociales?
Primero, quiero aclarar que no es un consultorio virtual, porque hay gente que cree que se puede hacer una consulta médica a través de internet y no es real. Las redes sociales son para que yo pueda bajar a mis seguidores lo que hago en una jornada laboral, contestar sus preguntas de una manera más general ya que seguramente lo que consulta una en vivo de Instagram o en una publicación, puede ser la duda de muchas. A veces con la visita a un consultorio no alcanza, pero cuando una mujer puede ver que lo que le pasa a ella también les sucede a otras, siente que no está sola ni es un bicho raro.
En Instagram tenes más de 160 mil seguidores, ¿qué significa eso para vos?
Pareja: animarse a saltar
Es un instrumento increíblemente maravilloso para educar, hace 20 años que ejerzo la docencia y descubrí que Instagram es una herramienta excelente para enseñar porque la gente se comunica entre sí. Quizás en el consultorio se animan a preguntar sobre algo, pero no hay mucho tiempo, entonces en un vivo o en los comentarios, como profesional tengo más tiempo para pensar una respuesta y analizar de qué forma decirlo. Además, en esta red social hay algo me enorgullece muchísimo que es que no hay agresión, no estigmatizamos, se generó mucha confianza y sobre todo, respeto.
¿Siempre fuiste activa en las redes?
Abrí mi cuenta en el 2017, y hace tres años que estoy muy presente porque esto no se forma de la noche a la mañana. Cuando hice la diplomatura en periodismo científico sabía que esto iba a pasar porque me encanta. Además, desde el primer momento que elegí ser ginecóloga lo hice para acompañar a las mujeres en distintas etapas de la vida, marcarles el camino porque la información da el poder, y el poder la posibilidad de elegir.
En mi cuenta de Instagram hay algo que me enorgullece muchísimo, no hay agresión, no estigmatizamos, se generó mucha confianza y sobre todo, respeto.
¿Cuáles son los mitos más frecuentes que tenes que derribar?
Tanto en el consultorio como en las redes un tema que se repite es la menopausia, hay mujeres que creen que es lo peor que les puede pasar, es un “cuco”. También los adolescentes, que se dice que “están en la edad del pavo” o que viven al límite. Hay que hablar de la prevención para no quedar embarazada, sí, pero también de la sexualidad de la primera vez, dónde llegan aturdidas y muchas veces buscan el orgasmo, pero no suele suceder, porque duele, sangra y se frustran. El mundo está lleno de mitos, eso es algo que se repite y hace mucho daño, por eso intento derribarlo.
¿Cómo surgió la idea de ‘Del cerebro a la vagina'?
Al ser una gran estudiosa de la neurociencia creo que lo que emociona se aprende mucho mejor, lo que mueve se recuerda, se memoriza. En el streaming no es que me voy a poner a actuar, sino que voy a tener un espacio lúdico e interactivo para que educar en salud desde otro lugar, que va a tener pantallas, animaciones y la voz de Dani ‘La Chepi’. Se va a profundizar mucho más en el deseo y en el “no tengo ganas”, lo que nos pasa cuando nos desenamoramos y cuando este deseo no es el mismo que antes. El cerebro en la vagina es eso, empezar a ver dónde comienza toda la excitación y cómo repercute en el cuerpo y la mente.
Con el auge de las redes sociales, ¿se podrá terminar con el tabú sexual que involucra a las mujeres?
Si, porque con esto se le abre la posibilidad de informarse a un montón de gente. Hace 20 años soy ginecóloga y sexóloga, escuché cientos de relatos, conozco muy bien la cultura argentina y hay miedos y vergüenza que arrastramos desde siempre. Desde muy chicas tenemos la inequidad con respecto a la sexualidad del varón, a tener los genitales más ocultos que ellos y que no se eduque en el placer femenino. Es todo un caminito que creo que gracias a las redes y el poder femenino que se está generando, podemos decir que estamos acá y tenemos derecho a la vida, al goce y a elegir con quién, cuándo, cómo y dónde. Soy una abanderada de dar estas herramientas y para mí es un orgullo.
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