Aunque Reneé Zellweger insista en que no se hizo nada, ahora podría estar a punto de perder el papel de Bridget Jones en la cuarta parte de la película. El Zellwegerwate continúa debido a que los productores han manifestado cierto malestar respecto de la nueva apariencia de la actriz de 45 años.
Perfilando deseos
Varias fuentes indican que la actriz de Jerry Maguire podría haberse sometido a distintas cirugías como para tratar de conseguir algún papel que le devuelva el éxito. Su último estreno memorable fue la segunda entrega de Bridget Jones hace ya diez años.
De acuerdo con los rumores, la reemplazante para la tercera entrega -en la que Hugh Grant ya anunció que no participará- podría ser Reese Witherspoon. En cualquier caso, para la actriz que acepte engordar para el papel, habrá un cheque de 25 millones de dólares.
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