Por Guillermina Rizzo*
Aunque usted no lo crea son 124 años de intentos masivos y unos pocos se han “salvado”. Desde 1893 a la fecha, giran las bolillas, los niños cantores cantan, y solo se modifica la vida de algunos.
Tal vez usted invierte todo su aguinaldo y va por “el entero”, o prima la cordura, o la realidad le recuerda que no puede y adquiere un décimo; tal vez participa de manera individual o decide probar suerte junto a sus compañeros de trabajo; tal vez año tras año sigue el mismo número o combina las edades de sus familiares. Apela a la estadística, a las cábalas, a la agencia ganadora y hasta reza la novena a San Cono. Así, tramita la realidad cotidiana fantaseando todo lo que podría hacer si se saca “el gordo”, imagina cómo cambiaría su vida: viajar, dejar el actual empleo, invertir, donar una parte, asegurarse la vejez; las ideas se suceden a la par de los millones en juego.
Los niños cantores ubicados, las bolas de madera, todas del mismo peso, se revuelven en el bombo; los millones en premio se corresponden casi con la misma cantidad de habitantes que hay en el país. Números, series y terminaciones se entremezclan con los sueños, con el deseo por sacarse “el gordo” y también muchos problemas de encima.
Mi querido lector, es 24 de diciembre y si está leyendo estas letras mientras comienza a saborear el pan dulce, es evidente que no se sacó “el gordo”. Pasaron más de ciento veinte años en que giró la primera bola y el juego de azar no puede resolver los problemas de la mayoría.
Hoy le traigo de regalo una caja de bolas, similares a las del sorteo, solo que cada una de ellas contiene una palabra; acá no hay billete ganador, acá todos ganamos. Las puede mezclar, combinar, agregarlas al árbol de Navidad; es mi pequeño diccionario.
Comencemos por la A: afectos, abundancia, alegría, amistad, aventuras, ayuda. Luego B: belleza, bien común, besos, brillo, bendiciones muchas. C: compasión, confianza, cooperación, creatividad, crecimiento, curiosidad. D: dar, decencia, descanso, dignidad, diversión, Dios. E: emociones, entusiasmo, esfuerzo, esperanza, estímulo. F: familia, fe, felicidad, fidelidad, fuerza, futuro. G: generosidad, grandeza, gratitud infaltable. H: habilidades, honestidad, humildad, humano. I: imaginación, inteligencia. J: justicia. ¿K? Evitemos. L: libertad, logros.
Claves para lograr una logenvidad saludable
M, llegamos a la mitad: magia, milagros, misericordia, motivación. N: nobleza. Ñ: ñükun, en mapuche significa calma completa. O: obras, optimismo, orgullo, orientación. P: paciencia, participación, pasión, perdón, perseverancia, poder, progreso, protección, prudencia, paz
Cómo empezar a moverse y ganarle al sedentarismo
imprescindible. Q: quiescencia. R: razón, relaciones de las buenas, resiliencia, respeto, responsabilidad. S: sabiduría, serenidad, servicio, sonrisas, sueños, superación constante. T: talento, tenacidad, trabajo digno, transformación, trascendencia. U: unión. V: valentía, verdad, visión, voluntad. W: weñüikenun: en mapuche reconciliar a uno con otro. X: incógnitas por descubrir. ¡Zas! el juego del diccionario no trae la Z.
Empoderada al fin
Le aseguro que la combinación de números al azar ofrece pocas chances, por eso lo invito a que tome estas bolillas, las mezcle y juegue, se juegue por valores.
Tal vez pueda tomar una cada día para cultivar, desarrollar; tal vez puede combinar varias, dos, cinco, diez. Puede jugar solo, en familia, con amigos, hasta con desconocidos…
Ghosting: "Mi pareja desapareció"
Tal vez se anima y agrega otras, pues valores y cualidades hay por doquier, solo que a veces nos concentramos en cuestiones efímeras, egoístas y hasta destructivas.
Este premio se conquista, se gana cada día y resuelve la vida de gran parte de la humanidad. Anímese a jugar. ¡Suerte! ¡Feliz Navidad!
(*) Dra. en Psicología. Columnista en medios de comunicación. | Twitter: @guillerizzo
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