Laura Gutman se refirió a lo que considera la "raíz de estos hechos dramáticos", en referencia al ataque terrorista sufrido en la sede del semanario Charlie Hebdo y en donde también menciona otros atentados sufridos en el mundo: el de las Torres Gemelas en Nueva York (2001), las explosiones en el subterráneo en Atocha, (Madrid 2004) y el atentado a la sede de AMIA en Buenos Aires (1994), para ella estos hechos no van a encontrar solución si se piensa sólo que hay que "redoblar la lucha".
Perfilando deseos
Para la psicoterapeuta, cuando suceden hechos de estas características "nos unimos en el resurgimiento de sentimientos que son propios de nuestra naturaleza humana", en referencia a la solidaridad, el amor a la vida y la compasión. Añade a su vez que, "los poderes políticos aprovechen el miedo generado en la población para reforzar el control sobre los ciudadanos, la militarización de la vida cotidiana y la brecha entre naciones, religiones o razas."
En un artículo de su autoría titulado "la raíz del drama”,considera que la violencia, en cierto modo incomprensible, no se debe a una cuestión de religiones o de culturas sino que responde a un problema "latente y desesperado de desamparo durante la primera infancia", y explica que los humanos vienen al mundo para "amar al prójimo", pero que al no haber recibido suficiente amor durante la etapa de la niñez, buscan "resguardo y pertenencia en cualquier lugar". El hecho de pertenecer a un "grupo" ofrece a la persona una identidad, un mismo objetivo y éste necesita las palabras de algún líder que "organiza nuestras emociones desencontradas. "
Los papás de hoy
La autora destaca que hay diferencias y excepciones en cuanto a lo que postula, ya que no todas las personas salen a matar, pero si pide reconocer que "el valor que le damos a nuestra vida -y a la vida de los otros- es proporcional al deseo de vivir", y esto está íntegramente relacionado con la cuestión de haber sido - o no- amados desde pequeños.
El fantasma y el reggaetón
Reflexiona al final del artículo que como sociedad, si se pretende cambiar el mundo, no queda otra opción que "revisar" el amor que se ha recibido en la primera infancia, para luego decidir amar.
Vale recordar que Gutman había recibido críticas por sus controversiales declaraciones frente a los casos de abuso, en donde ubicaba la figura del abusador del siguiente modo: “Vivimos dentro de un cuerpo de adulto pero tenemos organizadas las emociones como si fuéramos niños hambrientos ¿Qué nos pasa cuando nos relacionamos con un niño tierno? Lo queremos devorar. ¿Cómo lo devoramos? Lo tocamos. Lo acariciamos. Lo abrazamos, nos frotamos contra él. Le compramos regalos. La confidencialidad compartida, el secreto guardado entre ambos como un estupendo tesoro y los pequeños momentos de encuentro son vividos -desde nuestra emocionalidad infantil- como un momento sublime”.
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