Thursday 18 de April de 2024
CUERPO & ALMA | 25-11-2014 12:28

Llega el calor y la hora de la dieta

Consejos de alimentación sana fáciles de aplicar a la vida cotidiana para que cuidarnos y probarnos una bikini no sea una tortura.

(*) Por Andrea Purita

Está llegando el calor y se asoma el verano. Aquí es cuando comenzamos a descubrirnos. Pensemos que durante el invierno estamos cubiertas por la ropa y hasta los primeros calores no nos preocupamos demasiado por saber qué hay debajo de tanta vestimenta. Les propongo comenzar a incorporar estos tips antes que los primeros rayos de sol nos demuestren que tenemos que hacer algo para estar mejor. Tenemos tiempo, así que, ¡manos a la obra!

Pensemos en una alimentación conciente, pensemos en cada alimento que le damos a nuestro cuerpo y qué función y objetivo cumple en nosotros. En primer lugar es indispensable depurar nuestro organismo, para eso les propongo comenzar el día con:

JUGO DEPURATIVO 1, tomen nota:

1 zanahoria

1 vaso de jugo de naranja

1 pera

Colocar todo en el vaso de una licuadora y beber bien frio, antes del desayuno.

DEPURATIVO 2, por la tarde:

A un yogurt agregarle, 1 cucharada (tipo postre) de semillas de chía, sésamo negro y lino triturado.

Y ahora sí, más tips:

- Desayunar con una ensalada de frutas de estación y agregarle almendras “vivas” (remojar las almendras en agua durante 8 horas) y ocho pasas de uva.

- Tomar tres botellitas de agua de 500cc como mínimo y cuatro como máximo.

- Tener preparado un termo con infusión de tilo natural y tomar una taza veinte minutos antes y después del almuerzo y la cena. Si tenés mucha ansiedad, tomar esta infusión durante el día.

- Comer gelatina dietética sin restricciones, es proteína y agua. Es una manera de hidratarse, si no tomás mucha agua.

- Elegir pan integral con semillas. La fibra ayuda a mejorar el tránsito del intestino, evita la constipación.

- Si estás constipada es necesario mejorar urgente esa situación, ya que lo más importante en esta etapa, es desintoxicarnos y deshincharnos. Para esto, todas las mañana antes del desayuno comé un kiwi. Recordá que hay que hacerlo todos los días para que dé resultado.

- Incorporá al menos cuatro veces por semana pescados frescos, salmón, caballa, arenque, merluza, pez ángel. Otra opción es atún al natural o jurel al natural en lata. La forma de cocción es al vapor, a la parrilla, salteado con verduras, al horno, envuelto en papel de aluminio, acompañado con legumbres.

- Les recomiendo hacer un paquetito de caramelos saludables: ocho pasas de uva, cuatro almendras y dos mariposas de nueces. Comer un paquetito por día.

- Comé verduras y frutas (variar todas las verduras y limitar el consumo de frutas a tres por día). Se puede incluir una banana o un racimo de uvas.

- Medí la cantidad de aceite que consumís, lo ideal es dos cucharadas soperas por día.

- Agregá a tu alimentación tofu (queso de soja) y jengibre fresco.

- Incorporá arroz yamaní, lentejas, porotos, garbanzos, al menos dos veces por semana. Siempre con salsas naturales o en ensaladas.

- Podés comer un plato de pastas una vez por semana, con un salteado de verduras, con brócoli y ajo, con salsa de tomate natural, o con un pesto natural (1 cucharada de aceite de oliva, un puñado de albahaca y una nuez).

- Si te gusta, tomá una copa de vino tinto por día, contiene antioxidantes naturales muy buenos para evitar el envejecimiento.

- Reducí el consumo de sal, evitá el azúcar y poné el límite en tu estomago para evitar comer de más.

- Vamos por todo lo natural y descartá todo lo que no es natural, por ejemplo, polvos mágicos como jugos de sobre, sopas de sobre, comida pre-cocida, pre elaboradas, etc. Reducí el consumo de café, mate y gaseosas dietéticas.

- Es importante dormir bien ya que el mal descanso produce estrés, presión alta y aumenta la glucosa en la sangre, generando además, más hambre.

- Cená liviano (evitá las carnes rojas por la noche). Nunca te vayas a la cama inmediatamente después de comer, por lo menos esperá dos horas.

- Y por último, si tenés ganas de comer alguna cosita dulce, preparate un chocolate chico, sobre todo para las noches.

Recordá que el límite en el estomago lo ponemos desde la cabeza. Tomate el tiempo para comer, disfrutá de la comida y hacé de ese momento, un momento gratificante.

(*) Andrea Purita es nutricionista. Autora del libro Ni prohibido ni permitido de Ediciones Urano.

Galería de imágenes

Comentarios