Un vestido de Valentino fue el elegido para la cena de gala, justamente el mismo diseñador de su boda. El belga Edouard Vermeulen para la abdicación de Beatriz y para el momento cumbre de la entronización, su holandés favorito: Jan Taminiau. Impresionante la tiara de diamantes y zafiros que perteneció a la reina Emma. Fue diseñada en 1867 y cuenta con más de 30 zafiros.
Un "real" estilo: dejarse las canas
Las hijas de Máxima también de azul con simpáticos moños y ballerinas, y la reina también de azul aunque en otro tono. El detalle: las cuñadas. Laurentien con colores Orange y Mabel, de negro, quien está pasando un momento muy complicado con su marido en un coma irreversible, tristeza reflejada un poco en su atuendo.
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