Por estos días, muchas son las especulaciones y los escándalos a raíz de la cuota alimentaria que algunos padres famosos pelean en representación de sus hijos. El más polémico es el que debaten Jorge Rial y su ex esposa Silvia D’Auro, quienes se atacan con munición gruesa incluso a través de Twitter.
Otros casos resonantes, que por estos días también están haciendo ruido en los medios del espectáculo, son el de Amalia Granata y su ex el Ogro Fabbiani, el de Nazarena Velez y Daniel Agostini, y el de Leandro Penna, ex bañero de Marley (ahora en el Bailando de Tinelli), con la cordobesa Romina Brizzio.
Rouge se comunicó con una abogada de familia, Victoria Lambrechts, para clarificar algunas cuestiones acerca de la cuota alimentaria que establece por ley el Código Civil, pero que tiene sus vaivenes según la Jurisprudencia, que permite analizar cada caso en particular para definir su monto.
A continuación algunas aclaraciones:
- “La verdad es que, conforme a la ley, se trata de una obligación compartida por mitades tanto por la madre como por el padre. Lo que pasa es que la Jurisprudencia dice que, como hay un progenitor que se queda conviviendo con los hijos, que suele ser la madre, ese progenitor no puede desarrollar una vida económica profesional como el que no convive con los chicos. Por eso el juez suele establecer que el padre tenga un porcentaje mayor en la cuota alimentaria”.
- “La ley no establece porcentajes. Quien lo establece es el juez en función de la necesidad de los chicos, poniendo como prioridad que los hijos mantengan su estilo de vida tal cual la tenían cuando sus padres estaban juntos”.
- “La cuota alimentaria no tiene que ser necesariamente un monto en efectivo. A veces, si el padre previamente les pagaba la obra social o el colegio, el juez puede establecer que lo siga haciendo y agregarle algún otro monto en efectivo”.
- “El juez suele tener en cuenta el caudal económico del progenitor que no convive con los chicos a la hora de determinar el monto de la cuota alimentaria”.
- “Si un progenitor se queda sin trabajo, esa no es causa para que pueda pedir una disminución de la cuota alimentaria. Sí puede ser tenido en cuenta este pedido si el progenitor sufre un accidente que lo deja sin posibilidad de por vida de seguir ejerciendo su profesión”.
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