En el mundo del Diseño conviven cientos de historias de diferentes puntos del país como la de Margarita Velázquez, artesana de las agujas y el telar. A pesar de que estuvo a punto de no participar de la feria, las cosas se dieron de tal modo que al final pudo viajar y resultó ser una de las más elogiadas en el stand de Tucumán montado por el IDEP (Instituto de Desarrollo Productivo de Tucumán).
Así, pasó de ser una “señora que teje sacos, ponchos y tapados con lana de oveja y de llama” (como se llamaba ella) a ser “la tucumana premiada”. Acaba de recibir el galardón como Mejor Diseñadora de Provincia. Margarita es la revelación de este año dentro del grupo de tucumanos expositores y ha captado la atención no sólo de sus pares sino también de figuras referentes de la moda, como la modelo Valeria Mazza que de pasada por el stand de Tucumán, elogió y sacó fotos a sus tejidos.
Margarita es tucumana por adopción: nació en Entre Ríos pero hace décadas que vive en esa provincia. Comenzó a tejer a los ocho años y para la familia, según relata ella misma. Sus primeros pasos en la comercialización de sus productos fueron en Buenos Aires, cuando tejía para empresas que vendían sus productos, y a su regreso a Tucumán decidió hacerlo por cuenta propia. “Tejía para los vecinos, amigos, conocidos y repartía mis trabajos en bicicleta”, recuerda Velázquez.
Las terminaciones impecables de su trabajo, la prolijidad con que tiñe manualmente las lanas y sus diseños que llevan una impronta personal han sido motivo de elogios de diseñadores como Benito Fernández, Marcelo Senra y Marcela Molinari. El precio de sus trabajos oscila entre $800 a $1200. “Esta feria me fue una experiencia formidable. Vuelvo feliz de la vida, con la sensación de haber cumplido con mis hijos, que tanto me ayudaron, y con el resto de la familia”, concluye la tucumana.
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